Monterrey, Nuevo León. Los Tigres sellaron su boleto a Cuartos de Final de la Concacaf Champions Cup, viniendo de atrás para derrotar 3-1 al Cincinnati con global de 4-2.
Las acciones fueron de más a menos para los felinos, quienes iniciaron muy encimados sobre la visita, teniendo en Nicolás Ibáñez un par de remates al arco que se fueron desviados de la meta protegida por Roman Celentano, al 2′ y 14′, respectivamente.
Sin embargo, la paciencia rindió frutos en el cuadro de Pat Noonan, respondiendo al 17′ con el tanto sorpresivo de Evander Da Silva. El brasileño dio el pase a la red a una increíble jugada individual de Luca Orellano, silenciando al “Volcán”.
A partir de ahí, el conjunto regio retomó el dominio del cotejo, adueñándose de la posesión del balón pero con nula contundencia al área, pues las llegadas fueron casi escasas, solamente con una volea de Javier Aquino al 26′ tras un servicio Jesús Garza e irse al descanso en medio de abucheos.
Para el complemento, Guido Pizarro movió sus piezas con la reaparición de Fernando Gorriarán y Ozziel Herrera, siendo ambos piezas fundamentales en la remontada auriazul y cambiar los abucheos por aplausos.
Primero el dorsal ’77’, quién en apenas día minutos en cancha remató el centro de Juan Brunetta para el 1-1 al 64′, tanto de la esperanza y que trajo consigo un vendaval felino.
En un abrir y cerrar de ojos, la remontada llegó para Guido y compañía que en los pies de Brunetta lograron darle vuelta a las cosas, definiendo una gran pared con Herrera para el 2-1 al 69′, causando la algarabía hasta en el propio Pizarro, yéndose a celebrar hasta el córner con sus ahora pupilos.
La fiesta se cerró con la diana de Ibáñez, anotación con tintes de drama al revisarse en el VAR, el cual finalmente dio por bueno el gol de la tranquilidad para los regios al 72′, ventaja que no perderían y llevarse el triunfo en medio de una carretada de alabanzas del público, ahora les tocará esperar rival en cuartos de final entre Herediano y Los Angeles Galaxy.