Serena Williams informó que le habían extirpado un quiste benigno “del tamaño de una uva pequeña” en la zona del cuello y “que todo estaba bien”.
La tenista estadounidense retirada, quien cumplió 43 años el mes pasado, publicó el miércoles en redes sociales que le habían encontrado un bulto en el cuello en mayo pasado, se hizo una resonancia magnética y le dijeron que no era necesario que se lo quitara si no quería. Así que no lo hizo, “pero siguió creciendo”, dijo Williams.
Después de hacerse más estudios, incluida una biopsia que resultó negativa para cáncer, sus médicos le dijeron que debería someterse a un procedimiento.
Serena Williams mostró un video de ella misma en una cama de un hospital y escribió: “Así que aquí estoy quitándomelo. Me siento muy agradecida y afortunada de que todo haya salido bien, y sobre todo, estoy sana”.
En un mensaje por separado, dijo que “seguía recuperándose, pero mejorando. La salud siempre es lo primero”.
Williams anunció su retiro, evitando emplear ese término y en lugar de ello señalando que estaba “evolucionando” alejándose del tenis profesional, poco antes de jugar el Abierto de Estados Unidos en 2022, su último torneo.
Ganó 23 títulos de Grand Slam en individuales, la mayor cantidad para una mujer en la era profesional del deporte, y otros 14 en dobles con su hermana mayor Venus. Serena Williams pasó más de 300 semanas como número uno del ranking de la WTA y obtuvo cuatro medallas de oro olímpicas.