Sin duda la experiencia, entusiasmo y estudio constante de los entrenadores fue importante para que Nuevo León llegara a ser el mejor del país y ahí estaba el profe Tomás Olivo.
Se inició en el club San Antonio y cuando llega la revolución del futbol amateur es invitado por Tomás Galarza, coordinador en San Nicolás a unirse al grupo de entrenadores y formar las selecciones para los Estatales con mucho éxito.
Tomás Olivo se catapulta cuando dirige la selección de Nuevo León y conquista el primer título del Campeonato Nacional juvenil Benito Juárez, el más importante del Sector Amateur, pues casi la totalidad de los participantes ya estaban en fuerzas básicas de los clubes profesionales, en tanto los de Nuevo León eran netamente amateur y el profe Olivo sorprendió a todo el país.
Sería el inicio de un sin fin de títulos conquistados.
Formó el club Jaguares y lo llevó a la tercera división profesional y catapulta a un sin fin de jugadores al futbol de paga.
Formó un equipo, para ser parte del club Atlas de Gerardo “Yayo” González, otro de los grandes, para seguir la cosecha de trofeos. Tomás Olivo se fue a dirigir la selección de los ángeles del cielo, pero seguirá vivo en el corazón de los miles de jugadores que hoy son personas de bien, ese era Tomás Olivo!, Tomy (QEPD).