Conte, que regresa a la dirección deportiva tras un año de pausa después de su marcha del Tottenham Hotspur de la Premier League, ha firmado un contrato que le mantendrá en el estadio Diego Armando Maradona hasta 2027.
Se hará cargo de un Nápoles cuya defensa del título se vino abajo mucho antes del final de la temporada, en la que el club terminó 10º y no logró clasificarse para las competiciones europeas.
“Puedo prometer una cosa: haré todo lo posible para que el equipo y el club crezcan. Mi compromiso, junto con el de mi plantilla, será total”, afirmó Conte en un comunicado.
El técnico de 54 años, que jugó más de 400 partidos con la Juventus, cuenta con una dilatada experiencia en la Serie A, donde ha conquistado cuatro títulos de liga como entrenador del Inter de Milán y de la Juventus.
Conte, exseleccionador de Italia, también triunfó en Inglaterra con el Chelsea, con el que ganó la Premier League y la Copa FA de Inglaterra.
“Antonio es un gran entrenador, un líder”, dijo el presidente del Nápoles, Aurelio De Laurentiis.
“Estoy seguro de que será capaz de iniciar esa refundación necesaria tras la conclusión del ciclo que nos llevó a ganar el título de liga el año pasado después de muchas temporadas en la cima del fútbol italiano”.
“Hoy se abre un nuevo capítulo importante en la historia del Nápoles”.
El Nápoles sufrió una turbulenta campaña 2023-24, en la que tuvo tres entrenadores tras la marcha del técnico Luciano Spalletti, que luego ocupó el cargo en la selección italiana.
Spalletti fue sustituido por Rudi García, que fue destituido a los cuatro meses de empezar la temporada, antes de que el exentrenador Walter Mazzarri regresara para intentar enderezar el rumbo.
Mazzarri no logró un cambio de rumbo y se marchó al cabo de tres meses. El seleccionador eslovaco Francesco Calzona fue contratado temporalmente para dirigir al equipo durante la temporada.