PARÍS (AP) — En su último torneo internacional con Brasil, Marta regresa al lugar donde todo comenzó.
Seis veces nombrada jugadora del año, Marta tenía apenas 18 años en Atenas 2004, cuando cumplió su primera participación olímpica.
En ese entonces, Brasil disputó el partido por la medalla de oro, pero cayó ante Estados Unidos por 2-1 en la prórroga. Ambos equipos se volvieron a enfrentar en la final de los Juegos de Beijing 2008, pero Brasil volvió a perder, ahora por 1-0, y tuvo que conformarse otra vez con la plata.
Por eso parece apropiado que, para su despedida internacional, Brasil se mida nuevamente a Estados Unidos en la final olímpica, que se celebrará el sábado en el Parque de los Príncipes en París.
Marta, después de seis Juegos Olímpicos y seis Copas Mundiales Femeninas, ha dicho que es hora de entregarle el equipo a la próxima generación.
A sus 38 años, la futbolista nunca ha ganado un título internacional importante, ni en los Juegos Olímpicos ni en la Copa del Mundo.
Así que ganar el oro y vencer a su némesis Estados Unidos al mismo tiempo sería una dulce manera de despedirse.
“Esto ha sido gran parte de mi vida. A los 14 años me fui de casa y desde entonces solo vivo para el fútbol todos los días”, comentó a The Associated Press. “Siento que tal vez es hora de alejarme un poco y dejar que las jugadoras jóvenes brillen”.
Marta es muy conocida por las futbolistas del equipo estadounidense, no sólo porque es una de las mejores en la historia de este deporte, sino también porque juega en Estados Unidos con el Orlando Pride.
“Marta es sin duda la jugadora a la que más admiraba cuando crecía. Siempre que veía los mejores momentos de las jugadoras con mi padre, siempre era Marta”, dijo la delantera estadounidense Sophia Smith. “Jugamos contra ella en la NWSL, tenemos mucha suerte, y jugar contra ella en este partido, en esta magnitud, es muy especial. Sé que ella querría que le demos nuestro mejor partido. Ese es el mayor nivel de respeto que se le puede dar a alguien”.
Más conocida por su primer nombre, Marta Vieira da Silva ha marcado un récord de 119 goles en 184 apariciones internacionales con Brasil.
Marta creció jugando fútbol callejero con los chicos en Dois Riachos, un pueblo en el este de Brasil a unas 1.250 millas al norte de Río de Janeiro. Tenía solo 17 años en 2003, cuando apareció en la Copa Mundial celebrada en los Estados Unidos.
Tiene el récord de más goles en Mundial con 17, y ha marcado 13 en Juegos Olímpicos, sólo uno detrás de la marca de su compatriota Cristiane.
El viaje de Marta en su último gran torneo no ha sido fácil. Recibió una tarjeta roja por una falta a la española Olga Carmona, lo que le valió una suspensión de dos partidos por parte de la FIFA, por lo que se perdió los cuartos de final contra la anfitriona Francia y las semifinales, nuevamente, contra España.
Brasil sorprendió a las campeonas del Mundial Femenino por 4-2 el martes en Marsella.
“Lo hicimos por ella”, dijo su compañera Angelina. “Queremos darle una gran despedida. Era un sueño para mí jugar con Marta, y ahora es un sueño hecho realidad”.