Indicó que la actuación de Alemania y la dura pelea con España el viernes dejó en claro los beneficios del trabajo colectivo y la cooperación social —aunque lamentó el cruel final después de que el suplente Mikel Merino anotara de último momento en el tiempo extra para ganar.
“Nos hubiera gustado darles más a los aficionados, seguir más tiempo, jugar un buen fútbol, fútbol exitoso y conseguir el título”, aseguró Nagelsmann.
“Dije que necesitábamos a los aficionados apoyándonos porque sabíamos que no habíamos estado bien en los torneos anteriores, que nosotros como equipo, como Federación, no le dimos mucho de vuelta a la gente de este país desde el deporte”, indicó Nagelsmann. “Y creo que, en los últimos encuentros, los aficionados se percataron que queremos lograr algo y cambiar las cosas”.
Nagelsmann se refirió al involucramiento emocional de sus jugadores.
“Me han dicho que no es usual que casi todos los jugadores estén entre lágrimas al dejar el campamento. Creo que ese es un elogio para todo el personal”, comentó Nagelsmann intentando no llorar.
La derrota 2-1 ante España dejó a Alemania considerando el “hubiera” —qué hubiera pasado si el disparo de Niclas Füllkrug hubiera ingresado, qué hubiera pasado si su cabezazo cerca del final hubiera entrado o si el árbitro Anthony Taylor hubiera señalado un penal en el tiempo extra cuando el disparo de Jamal Musiala pegó en el brazo de Marc Cucurella.
Casi todo el análisis y reflexiones alemanes se enfocan en la decisión de Taylor, pero el presidente de la Federación de Alemania Bernd Neuendorf y el mánager Rudi Völler se enfocaron en el hecho de que Nagelsmann restauró el orgullo hacia la selección tras varios malos torneos.
“Hace meses nuestro sueño era volver a tener el apoyo de los aficionados, cómo hacer que los alemanes se volvieran a sentir orgullosos de nosotros”, indicó Völler. “Lo podías sentir en cada partido, incluso ayer cuando hubo una gran decepción al no lograrlo. Pero la gente nos apoyó y esa es una gran sensación”.
El interés por la selección creció mientras el equipo siguió avanzando — la televisora pública ARD dijo que 26 millones de personas vieron el duelo de cuartos ante España, más que en cualquier partido anterior de la Euro y en la fase de grupos del Mundial de Qatar 2022, cuando el equipo de Hansi Flick quedó fuera tras tres encuentros.
Nagelsmann habló de seguir construyendo con el equipo pensando en la Copa Mundial 2026 en México, Estados Unidos y Canadá después el contrato del entrenador de 36 años fue renovado antes del inicio de la Eurocopa.