Un grupo de 23 personas se sumó a la aventura para recorrer un promedio de 120 kilómetros diarios a través de los Alpes, Austria, Suiza y Francia. Tras 12 días de pedaleo llegaron a la capital francesa, donde el viernes se celebra la ceremonia de apertura de los Juegos.
“Fue una gran sensación. Llegamos, nos abrazamos. A alguien se le saltaron las lágrimas. Fue un momento conmovedor”, dijo a Reuters Enzo Chiumento, padre de Luca.
“Había muchas emociones. Cada uno tenía sus razones para venir aquí. Uno de nuestros miembros tenía un hijo ingresado en el hospital pediátrico”.
La organización humanitaria “Citta della Speranza” (Ciudad de la Esperanza) es una fundación de Padua que comenzó hace 30 años, y que ha construido y mantiene un hospital pediátrico de hematología en la ciudad italiana. Enzo fue uno de los ocho ciclistas que completaron el viaje.
“Fue una gran experiencia. No nos conocíamos de antes. Se organizó espontáneamente. Los que pensaban que podían hacerlo vinieron con nosotros”, dijo Enzo.
“Y por eso estamos aquí. Los Juegos Olímpicos eran la ocasión adecuada. Mi hijo competirá en cuádruple scull. Acompañamos a nuestros atletas hasta París. El objetivo de recaudar fondos para la Ciudad de la Esperanza fue una de las dos razones, casi la principal”, agregó.
Ahora que ha cumplido ese objetivo, Enzo puede concentrarse en apoyar a su hijo cuando el sábado empiece el cuádruple scull, prueba en la que Luca ganó el oro en los Campeonatos de Europa de 2022.
