Los pilotos de Fórmula Uno respondieron a las medidas drásticas adoptadas por el organismo rector del automovilismo mundial contra los insultos pidiendo al presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, que les trate como adultos y que cuide su propio lenguaje.
El sindicato de pilotos de Fórmula Uno GPDA publicó el jueves en Instagram una declaración colectiva sobre la “mala conducta de los pilotos”.
Max Verstappen, tres veces campeón mundial con Red Bull, fue sancionado por su lenguaje en una conferencia de prensa en el Gran Premio de Singapur en septiembre, mientras que Charles Leclerc, de Ferrari, fue multado por proferir insultos en el Gran Premio de México del mes pasado.
También hubo polémicas en el pasado sobre piercings y joyas, con un enfrentamiento del heptacampeón mundial Lewis Hamilton por un pendiente en la nariz en 2022, y el cumplimiento de las normas sobre ropa interior ignífuga.
El comunicado de la GPDA dijo que los pilotos son profesionales en la cumbre del deporte, gladiadores que ofrecen un espectáculo a los aficionados. Asimismo, señaló que hay una diferencia entre insultar a otros y el uso casual de palabras malsonantes para describir una situación o un objeto inanimado.
“Instamos al presidente de la FIA a que también tenga en cuenta su propio tono y lenguaje cuando se dirija a nuestros pilotos o, incluso, cuando hable de ellos en un foro público o de otro tipo”, añadió. “Además, nuestros miembros son adultos, no necesitan recibir instrucciones a través de los medios sobre asuntos tan triviales como el uso de joyas y calzoncillos”.
Ben Sulayem causó sensación el mes pasado en una entrevista en la que se refirió al “lenguaje soez” y dijo que los conductores no debían sonar como raperos.
La GPDA reiteró su opinión de que las multas a los conductores son inapropiadas.