LIMA (AP) — Christian Cueva, futbolista peruano que formó parte de la selección de su país en el Mundial de 2018, fue separado del club local Cienciano luego que la justicia le prohibió acercarse a su esposa, quien lo denunció por violencia de género.
Cueva, de 32 años, fue denunciado el lunes por violencia física y psicológica y un día después la Corte Superior de Justicia de Lima le prohibió “cualquier tipo de acto que implique violencia familiar y acercamiento, bajo apercibimiento de ser denunciado por desobediencia a la autoridad”.
Las noticias locales en el país sudamericano mostraron en los últimos días un video que se remonta a febrero y que parece mostrar una agresión física por parte del mediocampista contra su esposa Pamela López, con quien vivió más de una década y tiene tres hijos.
La mujer señaló a la televisora local América que había sufrido “varios episodios” de violencia.
Luego de que la justicia sancionó al jugador, Cienciano, que había oficializado su contrato a inicios de la semana, anunció el martes que lo separó “de forma definitiva” tras una investigación interna. Añadió en un comunicado que rechaza “de manera categórica cualquier forma de violencia, especialmente la violencia de género”.
En su defensa, Cueva pidió en un comunicado que “por favor” se le permita seguir jugando al fútbol “mientras la verdad se busca y encuentra en las instancias correspondientes”.
El futbolista, que en su carrera deportiva ha sido cuestionado por presuntos actos de indisciplina, se encuentra sin jugar desde diciembre tras finalizar su contrato con el club local Alianza Lima donde disputó 27 encuentros sin marcar goles.
Cueva ha jugado en algunos equipos internacionales, incluidos el deportivo Toluca de México y Sao Paulo de Brasil. También fue una pieza clave en la clasificación al Mundial de Rusia, al que Perú llegó tras 36 años de ausencia.