“En este club se hace un trabajo fantástico con los jóvenes. He podido ver cómo juegan, cómo trabajan duro… En el campo saben exactamente en qué posición tienen que ubicarse y, cuando tocan el balón, saben muy pero que muy bien qué tienen que hacer con él”, destacó Flick.
Para el nuevo entrenador del Barça, muchos de estos jóvenes tendrán un sitio en el primer equipo, pero matizó que aún tienen que mejorar, “porque no están al máximo nivel”. E insistió en que su trabajo como técnico será “hacerles evolucionar”.
“Hay muchos jugadores interesantes y veremos en los próximos días”, apuntó Flick, quien adelantó que a la gira por Estados Unidos se llevará a 30 o 31 jugadores, “porque queremos verlos a todos y hacer que mejoren”.
Acompañado del presidente del club, Joan Laporta, y de 101 periodistas acreditados, el germano vivió su puesta de largo en el Auditori 1899 a tres días de cruzar el charco para disputar tres amistosos contra el Manchester City, el Real Madrid y el Milan.
En la gira norteamericana no estará una de esas estrellas emergentes de la cantera azulgrana, el delantero Lamine Yamal, aún de vacaciones tras ganar la Eurocopa con España.
“Está haciendo un trabajo espectacular. Desde el año pasado ha mejorado muchísimo y, poco a poco, va subiendo escalones. Su juego en la Eurocopa ha sido impresionante, está en una senda fantástica de crecimiento, pero los grandes jugadores también pueden mejorar. Lo importante es que esté con los pies en la tierra”, comentó sobre Yamal.
Tampoco viajará el delantero Ansu Fati, otro canterano que regresa al Barça tras su cesión al Brighton, y que se ha visto obligado a parar tras lesionarse en la planta del pie derecho durante la pretemporada.
Flick no escondió que la lesión de Fati es un contratiempo para él: “Ansu ha hecho unos primero días de entrenamientos buenísimos, se estaba poniendo en forma y es una lástima no tenerlo en la gira por Estados Unidos”.
Con el que tampoco podrá contar, no solo en la pretemporada sino durante los primeros meses de competición, es el central Ronald Araujo, que estará unos cuatro meses de baja tras ser intervenido de la lesión en el isquiotibial de la pierna izquierda que sufrió en la Copa América.
“Cuando un jugador de tanta calidad está lesionado, no es bueno ni para mí, ni para él ni para el club, pero hay que aceptarlo. Esperemos que vuelva lo antes posible, porque en defensa necesitamos estabilidad. Veremos cómo nos va sin él”, comentó Flick sobre la ausencia del internacional charrúa.
Y reconoció que al centrocampista Pablo Paéz Gavira ‘Gavi’ hay que frenarle en la recuperación de la grave lesión de rodilla que sufrió el curso pasado.
“Gavi, cuando está en el césped, siempre está ‘on fire’. Quiere volver rápido, pero tiene que tener paciencia. Le daremos el tiempo que necesite, porque esperamos que pueda estar 14 o 15 años jugando en este equipo. Ya ha demostrado todo lo que puede dar a este club”, explicó.
Flick, que confirmó que el centrocampista Sergi Roberto “ya no es jugador del Barcelona” y no quiso hablar de la posible contratación de Nico Williams -“es un jugador que de momento está en otro equipo”, contestó- dejó entrever que no considera prioritario contratar un centrocampista defensivo.
“Por el momento, estoy muy contento con lo que he visto aquí, con jugadores en el equipo que pueden jugar en el pivote. Primero debo recuperar a los lesionados y a los que están fuera. Pero tenemos jugadores que pueden adaptarse bien a esa posición”, señaló.
Sobre su libro de estilo, Flick reivindicó que quiere que su equipo sea “activo con balón y sin balón” y que lleve siempre la iniciativa: “que pueda decidir el ritmo del partido y lo que quiere hacer en cada momento”. Y que, más allá de “jugar un 4-3-3 o 4-2-3-1”, el objetivo es “hacer disfrutar al aficionado con un fútbol bonito”.
Dos meses de después de firmar por el Barcelona y “cumplir el sueño” que tenía desde que entrenaba al Hoffenheim, Hansi Flick, confesó que, aunque ya sabía que venía “a un de los clubes más grandes del mundo”, le ha sorprendido “la pasión” con las que se vive el Barça en todos los ámbitos.
Insistió en que ha venido “a intentar luchar por todos los títulos”, pero advirtió que todavía es pronto para saber a lo que puede aspirar su equipo. Eso sí, dijo ser consciente de donde está. “No siento presión por entrenar al Barça, forma parte de mi trabajo. Estoy preparado”, aseguró.
Una afirmación con la que coincidió Laporta, quien calificó a Flick como “el hombre idóneo” para dirigir el nuevo proyecto deportivo “por su experiencia, cultura del esfuerzo, disciplina y confianza en la estructura del club y en el trabajo hecho en La Masia”.