Luego del primer título en la época dorada en el año de 1983, Nuevo León se fue a las nubes, ya que era una prueba que en nuestra entidad existe calidad, solamente se necesitaba impulsarla y darla a conocer.
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Las selecciones de Nuevo León de las distintas categorías empezaban a salir a los Nacionales y ya no era un privilegio, sino un compromiso de colocarse entre los primeros lugares, al grado que la obligación era calificar como mínimo.
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Llegó un momento que a Nuevo León se le consideró una potencia, al ganar el reconocimiento como la mejor del año por dos ocasiones en forma consecutiva.
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La calidad era de lo mejor y se daban un agarrón con Jalisco y Sinaloa y de vez en cuando con la UNAM, dado que era común verlos en la ronda de los play off en las distintas categorías.
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Varias veces acudimos a los Torneos Nacioales en otras ciudades y se nos permitía estar presentes en la junta previa, donde se llevaba a cabo la integración de grupos.
-o0o-Veíamos como los delegados de los diferentes estados mostraban su angustia porque no deseaban quedar dentro del grupo de Nuevo León a quien consideraban lógico favorito, no solamente para calificar, sino para llevarse el campeonato.