Hoy en día surgen personajes por todos lados con deseos de organizar torneos de futbol, sin tener siquiera la experiencia necesaria para llevar a cabo dichos eventos.
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Torneos al vapor, con el propósito de hacer dinero, aprovechando el entusiasmo de los jóvenes por practicar su deporte favorito, aunque no tengan un épice en cuanto al conocimiento de las reglas.
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Esto también se refuerza, ante el hecho de no dar cuentas a nadie de sus actividades, por lo cual hacen y deshacen como les venga en gana, más bien como mejor les conviene.
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Se ha visto en los medios de comunicación, especialmente en el face infinidad de anuncios donde solicitan árbitros para sancionar encuentros de futbol amateur, tanto de niños, jóvenes, adultos, veteranos, varonil y femenil.
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Lo que indica el descontrol, en cuanto a las ligas de futbol, como a los grupos de árbitros, los cuales antaño estaban controlados y se debía seguir un protocolo para llevar a cabo todos los planes, los cuales resultaban un éxito.
-o0o-Para hacer un torneo, se debía contar con el aval de la Asociación y esta exigía que los árbitros a contratar fueran de los grupos afiliados a la Delegación Estatal, con lo que se garantizaba la calidad del torneo y de los silbantes.