Monterrey, Nuevo León. Los Tigres vinieron de atrás y sacaron una ventaja de 2-1 sobre León, llevándose el primer episodio de las semifinales de la Concachampions.
Los felinos vinieron de atrás pues apenas a los 5 minutos se fueron sorpresivamente abajo con el golazo de Víctor Dávila. El chileno se mandó una espectacular anotación, luego de prender de fuera del área una esférica inalcanzable para Nahuel Guzmán.
La respuesta local llegó al 13′ en los pies de André Pierre-Gignac, el ariete francés quiso hacer la proeza con una “picada” de balón para clarear a Rodolfo Cota, sin embargo, la redonda se fue raspando el poste y ahogando el grito de gol en las gradas del ‘Volcán’.
A partir de ahí, Guzmán se volvió el héroe del juego para la causa auriazul con sus estupendas atajadas, primero al 22′ le negó el cometido a Elías Hernández que de chilena por poco amplió más el resultado. Otro paradón del argentino se hizo presente al 28′ a un tiro de larga distancia de Jaine Barreiro.
Pasando la media hora del duelo, los universitarios despertaron y su ofensiva accionó el detonante en busca de emparejar los cartones, no obstante, se toparon con una falla garrafal de Gignac, quien a bocajarro erró un cabezazo de trámite ante la incredulidad del público felino.
Hasta el 44′ llegó el tanto de la paridad llegó en el menos pensado, siendo Sebastián Córdova el autor del 1-1, cerrando la pinza de Luis Quiñones, que hasta ese momento era el más abucheado por la afición por su imprecisión en los pases. En esta ocasión, su servicio dio directo a los botines del dorsal ’17’ para darle más emoción a la causa. El cafetalero tuvo su revancha a lapsos previos del descanso, haciendo la remontada con un tiro de zurda luego del recentro de Samir Caetano y hacer explotar al ‘Uni’ con el 2-1.
El segundo lapso mantuvo las mismas emociones, iniciando con una tapada heróica de Cota a Gignac, que no podía creer que la redonda no entraba por más impetu que pusiera.
Entre cambios y un ligero bajón de llegadas, los equipos pese a sus intentos no pudieron añadir más tantos al marcador, por lo que el reloj marcó su final dejando a ambas escuadras más que “picadas” de cara a la vuelta del siguiente miércoles en el Nou Camp, dónde se conocerá al segundo finalista del certamen internacional.