Edoardo Bove está “despierto, alerta y orientado”, informó este lunes la Fiorentina en las redes sociales, después de que el futbolista perdiera el conocimiento el domingo durante un partido contra el Inter de Milán, que fue aplazado tras el incidente.
“Tras pasar una noche tranquila, fue despertado y extubado esta mañana. Actualmente se encuentra despierto, alerta y orientado”, señaló el club sobre el futbolista, ingresado en el hospital Careggi de Florencia.
“Ha hablado con su familia, con la dirección del club, el entrenador y sus compañeros, que acudieron a verlo nada más escucharon las buenas noticias”, continuó la entidad.
“Nuevos tests se llevarán a cabo en los próximos días para establecer qué provocó que se llegara a esta crítica situación ayer”, añadió.
Bove, centrocampista italiano de 22 años, se derrumbó sobre el césped a los 16 minutos de juego (0-0 en el marcador), en medio de convulsiones según las imágenes de televisión, rodeado por compañeros y rivales que mostraban evidentes gestos de preocupación.
La Fiorentina indicó a continuación que Bove se hallaba sedado en la unidad de cuidados intensivos del hospital Careggi de Florencia, donde llegó en estado “estable”.
“Los primeros exámenes cardiológicos y neurológicos permitieron descartar lesiones graves del sistema nervioso central y del sistema cardiorrespiratorio”, añadió el club en un comunicado conjunto con el hospital.
La liga italiana señaló a la AFP que este lunes se llevará a cabo una reunión para decidir cuándo se jugará el partido. Los medios italianos señalaron que podría ser reprogramado en febrero.
Ese desfallecimiento hizo revivir en la ‘Fiore’ el doloroso recuerdo de la muerte del antiguo capitán Davide Astori en 2018, fallecido mientras dormía a los 31 años antes de un partido de liga ante Udinese.