El portugués Ruben Amorim, ambicioso “soñador” de 39 años, inicia el domingo (16h30 GMT) en Ipswich su aventura en el banquillo del Manchester United, un gigante dormido que nunca llegó a recuperarse del todo tras la marcha de Alex Ferguson.
Suceder al legendario técnico escocés, retirado en 2013 con 28 títulos en sus vitrinas, no podía ser sencillo. Pero el paso de los años y las sucesivas decepciones muestran que la misión es casi imposible.
David Moyes, Louis van Gaal, José Mourinho, Ole Gunnar Solskjaer y Erik ten Hag fracasaron, bien en la Premier League o en la Champions League, las dos competiciones que miden al histórico club.
Amorim, por su parte, se muestra confiado en devolver la ilusión a los aficionados de Old Trafford, ‘Teatro de los sueños’.
“Llamadme ingenuo, pero de verdad creo que soy el hombre adecuado en el momento preciso”, declaro el entrenador luso el viernes en su primera conferencia de prensa. “Soy un poco soñador y creo en mí”, insistió, cómodo ante las cámaras.
El ex del Sporting de Lisboa toma las riendas de un equipo irregular, con un estilo de juego previsible, 13º en liga con sólo 4 victorias en once fechas. Los ‘Red Devils’ tienen sin embargo el podio a tiro de piedra, a cuatro puntos.
- Retos –
En su primera experiencia en el extranjero, Amorim afronta un reto hercúleo sin una gran experiencia en la mochila. En el Sporting (2020-2024) conquistó el campeonato portugués en dos ocasiones con un fútbol ofensivo y enérgico.
Aunque rechaza las comparaciones con el más célebre entrenador portugués, que también dirigió al United. “Soy diferente a Mourinho, él fue campeón de Europa, yo no”, sentenció el viernes sobre el ‘Special One’, ganador de la Champions con el Oporto en 2004.
Llegado a Inglaterra el 11 de noviembre, Amorim, que cumplirá 40 años en enero, no ha tenido mucho tiempo para conocer a su grupo de jugadores, a los que alabó el viernes.
“Creo realmente en los jugadores. Sé que ustedes no creen mucho en ellos, pero yo creo mucho. Creo que podemos mejorar, y quiero probar nuevas cosas. Ustedes piensan que no es posible, yo creo que es posible”.
Sin embargo, no ocultó la dimensión del trabajo que tiene por delante, ya sea en la “comprensión del juego”, el “aspecto físico” o “el repliegue defensivo”.
Sobre el terreno de juego, el cambio más visible podría ser la organización defensiva, con una línea de tres jugadores y no de cuatro como disponía Ten Hag.
El antiguo centrocampista de Belenenses y del Benfica dispondrá de pocas sesiones de entrenamiento para inculcar sus principios a su equipo, porque el inicio de su mandato coincide con el periodo más denso de la temporada.
El desplazamiento el domingo a Ipwich lanza una serie de doce partidos hasta el 5 de enero, fecha de la visita al Liverpool, actual líder y rival histórico del United. Una realidad que no deja mucho tiempo para soñar.
