El Amateur
aquellos jóvenes y niños de antaño, hoy en día nos confiesan que al cruzar por los puentes Félix U. Gómez, Zaragoza, Pino Suárez o Cuauhtémoc y observar cómo se encuentra el lecho del río Santa Catarina, se llenan de nostalgia.
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Dejan volar su mente y retornan al pasado, cuando ese espacio estaba lleno de áreas deportivas de diferentes disciplinas, que lo llevó a convertirse en el centro deportivo más grande del mundo.
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Como dicen, ese lugar, ni Obama lo tenía, por ello fue un orgullo a nivel nacional e internacional, el contar con ese espacio donde miles de personas practicaban su deporte diariamente.
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Se llenan de nostalgia y los recuerdos aparecen, cientos y miles de anécdotas, cosas chuscas, otras alegres, unas más de felicidad por los campeonatos obtenidos.
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También las derrotas, incluso las fracturas, pero al igual hubo muchas ocasiones románticas, pues en ese punto de reunión también se conocieron infinidad de parejas, que al tiempo formaron una bonita familia.
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Era un beneficio social, un lugar de reunión sanamente, donde incluso se convertía en día de campo, al igual como dicen ahora, para ir de shopin.
